Viernes, 2 de julio de 2010
Redacción Analítica
El lago de Maracaibo –el más amplio de Latinoamérica- muestra, desde principios del mes de junio, manchas de petróleo dispersas en 8% de su superficie. Este fenómeno no es nuevo debido a que, desde principios del siglo XX, se han perforado más de 14.000 pozos en el lugar. “Este caso es dramático por la magnitud del deterioro ecológico y el daño social causado a más de 10.000 pescadores, quienes reclaman una indemnización de Bs. 20.000 por pérdidas”, explicó el ingeniero Pablo Emilio Colmenares, presidente de la Asociación Civil para la Conservación de la Cuenca del Lago de Maracaibo (Aclama).
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Ante este panorama oscuro se han generado opiniones confusas. Las autoridades aseveran que no hay tal derrame de petróleo, pero ecologistas y políticos han alzado la voz para llamar la atención ante esta tragedia ambiental.
El ministro de Energía y Petróleo, Rafael Ramírez, aseguró que se han presentado “fugas crónicas” de pequeña magnitud que ya han sido controladas y que no representan ningún problema. Sin embargo, dijo que 3.000 personas se encuentran trabajando en labores de recolección de crudo en las costas zulianas.Paralelamente, el presidente del Consejo Legislativo del estado de Zulia, Eliseo Fermín solicitó la destitución tanto de Ramírez como del ministro del Ambiente Alejandro Hitcher, por su pasividad ante este presunto ecocidio originado por las expropiaciones a empresas que ofrecían mantenimiento a las tuberías petroleras.
A fin de obtener una mayor comprensión del tema, Analitica.com contactó al ingeniero Pablo Emilio Colmenares, presidente de Aclama, quien explicó su percepción sobre el estado actual de las aguas.
- ¿Son frecuentes los derrames de petróleo en el lago de Maracaibo?
-Hasta el 2.003 la información sobre lo que sucedía en el lago, en cuanto a la industria petrolera, era conocida sin reservas y se podía sobrevolar en helicóptero su superficie. A partir de ese año, el silencio es total. Antes de esa fecha, se producía un derrame al día, el cual era recogido dentro del plan de contingencia que la industria petrolera tenía desde su nacionalización en 1976. Ahora eso no sucede.
- ¿Cuál es la situación actual en el lago?
-Es dramática debido a los daños ecológicos que se han ocasionado a la fauna, flora y a las playas y costas tanto oriental como occidental. A eso se suma el daño social causado a más de 10.000 pescadores, quienes reclaman una indemnización por pérdidas de Bs. 20.000.
- ¿Cuál es la causa principal de este desastre ecológico?
-Fundamentalmente es la no aplicación del plan de contingencia que la industria tenía para derrames de petróleo. Estoy seguro que si se hubiera puesto en práctica desde que se detectó el primer derrame, lo que observamos hoy, no hubiese sucedido. Yo me pregunto: ¿Por qué no se actúo?, ¿por qué la Fiscalía Ambiental no se ha manifestado después de un mes de haber sucedido un daño ecológico público y notorio? Dejo esas preguntas abiertas para la reflexión.
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-¿Cuál es el impacto ambiental de un derrame petrolero?
- Si se trata de un crudo menos denso, lo primero que se observa en el agua es la formación de una capa de petróleo que bloquea la entrada de la luz, afectando a especies como las algas que la necesitan para realizar la fotosíntesis. Ellas, al ver disminuida su reproducción, pueden morir dejando sin alimento a otros animales de la cadena trófica. También, de forma inmediata, la capa de crudo representa una barrera física que dificulta la transferencia de oxígeno desde el aire al agua. Además la presencia de la mancha daña a las aves acuáticas que, al zambullirse y nadar, quedan impregnadas de petróleo. Buena parte de las aves muertas se hunden y muy pocos cuerpos son arrastrados hacia la orilla por la corriente. Los mamíferos acuáticos que tienen que salir a la superficie para poder respirar, al entrar en contacto con el hidrocarburo, pueden sufrir obstrucciones en las vías respiratorias.
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Si el petróleo derramado es más denso que el agua, lo cual ocurre en Venezuela, el crudo no flota, sino que se va al fondo del agua y se queda en los sedimentos afectando a muchas especies bentónicas que, por lo general, son más longevas que las que viven en la columna de agua. Algas y líquenes se van recubiertos de petróleo y terminan asfixiados. Cuando esto sucede, tarda mucho tiempo la recuperación del ecosistema, probablemente un centenar de años o más.
-¿Quiénes son los más afectados por los derrames de petróleo?
-En primer lugar, los pescadores porque ven mermada su captura, baja su productividad y disminuyen sus ingresos. En segundo, cuando los derrames son de un volumen considerable existe un riesgo potencial de salud pública porque la contaminación del agua se propaga a lo largo de toda la cadena trófica y se hace necesario establecer controles sanitarios para verificar el estado de peces y moluscos expuestos al consumo humano. En conclusión, la degradación de un ecosistema representa una pérdida sensible del patrimonio natural.
Vea nuestra fotogalería del derrame de petróleo en el lago de Maracaibo:
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